Prefiero que me duela a que me traspase, que me haga daño a que me ignore. Prefiero sentir.
Prefiero una noche oscura y bella, sucia y hermosa, a un montón de días claros que no me digan nada. Prefiero una cadena a un bozal.
Prefiero quedarme en la cama todo el día pensando en mi vida a levantarme para pensar en la de otros.
Prefiero un gato a un perro.
Porque el gato te araña, es infiel, te ignora, se escapa, pero sabes que, a pesar de todo, no podría vivir sin ti.
No hay comentarios:
Publicar un comentario